El Sevilla es un grande

Tras vencer al Real Madrid, el equipo de Juande Ramos recuperó la segunda plaza a dos puntos del Barcelona.
Los jugadores del Sevilla celebran, junto con Chevanton, bajo sus compañeros, el gol de la victoria. (Julio Muñoz / EFE)
Los jugadores del Sevilla celebran, junto con Chevanton, bajo sus compañeros, el gol de la victoria. (Julio Muñoz / EFE)
Los jugadores del Sevilla celebran, junto con Chevanton, bajo sus compañeros, el gol de la victoria. (Julio Muñoz / EFE)
En el fútbol no hay mejor medicina que la victoria. Y si está aderezada con buenos goles, la satisfacción se multiplica. El Sevilla, tras su pinchazo ante el Espanyol, volvió a reivindicarse como un aspirante a llevarse esta Liga después de doblegar (2-1) a un Real Madrid que se adelantó en el marcador.
El Sevilla, que con su triunfo recuperó la segunda posición en la Liga, acecha el liderato a dos puntos del Barcelona. «Somos los únicos que seguimos la estela del Barça», presumía tras el partido José María del Nido, presidente de la entidad hispalense.

Gol para enmarcar

Aunque el juego no fue brillante, el equipo dirigido por Juande Ramos demostró oficio, solvencia defensiva y, ante todo, mucha pegada en el ataque. Kanouté, su delantero estrella, se reafirmó en la carrera por el Pichichi con once goles, empatando con Ronaldinho y Diego Milito. Jesús Navas, en su regreso, se dejó ver, al igual que Luis Fabiano o Poulsen, incansables. En la retina quedará almacenado durante mucho tiempo el gol de la victoria: esa media chilena del uruguayo Ernesto Javier Chevanton en el área pequeña del Real Madrid.

Enzo Maresca ya está en casa

Tras pasar la noche del sábado en la clínica USP Sagrado Corazón, el centrocampista italiano Enzo Maresca recibió ayer el alta, después de haber sufrido un traumatismo craneoencefálico leve fruto de un violento choque con el ex sevillista Reyes. El jugador, hasta nueva orden, estará bajo observación domiciliaria.

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