Está dirigido a un público joven, que busca que el vehículo sólo cuente con lo necesario y que este mínimo equipamiento rinda a la perfección. El modelo de 50 destaca por su escaso nivel de contaminación. También es ínfimo el consumo de combustible, en torno a los 43 km por litro. El bloque motor está construido en aluminio, y las diferencias entre el motor pequeño y el de cuarto de litro están en el tamaño de cárteres y los refuerzos.
Dispone de un conducto de seguridad que, en caso de sobrecalentamiento, evita que la evaporación del aceite quede retenida.
Su estética es de líneas sobrias pero fluidas. Equipa los mismos componentes de la gama Kymco. El bastidor, las suspensiones, los frenos y las ruedas son comunes a otras 125 y 250.
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