Temporada aciaga para Cristiano Ronaldo. El delantero del Real Madrid, un ganador nato, ha visto desfilar delante de sus ojos oportunidades para encumbrarse -aún más- en este deporte llamado fútbol.

Tras su aterrizaje en el Madrid, poco podía imaginar que sería un año "en blanco". Sin títulos. Pero así fue. El 'alrcorconazo' primero, y el 'lyonazo' después, hicieron que todas las ilusiones blancas se pusieran en la Liga. Pero la caza y captura del Barça finalmente no dio sus frutos.

Con ello, la última esperanza del luso era este Mundial. Pero se va, en octavos y por la puerta de atrás. A regañadientes con su técnico Queiroz y criticado por muchos por no ejercer de ejemplar capitán.

En lo individual, otra 'puñalada': Messí le ha superado esta temporada como el mejor jugador del mundo, acaparando galardones y elogios a partes iguales.

Ahora, Ronaldo está de vacaciones. Y seguro, por su espíritu ganador, ya pensando en la próxima temporada con el Madrid de la mano de Mourinho.