Ridículo en Pamplona

El Deportivo se mostró sin ideas ante Osasuna y salió goleado del Reyno de Navarra sin excusas.
Juan Rodríguez realiza una entrada sobre Milosevic, de Osasuna.(Reuters)
Juan Rodríguez realiza una entrada sobre Milosevic, de Osasuna.(Reuters)
Juan Rodríguez realiza una entrada sobre Milosevic, de Osasuna.(Reuters)
Osasuna 4
Deportivo 1

Reyno de Navarra: 17.000 espectadores.

Osasuna: Ricardo, Javier Flaño, Cruchaga, Josetxo, Corrales, Valdo (Juanlu, min 88), Puñal, Nekounam, David López (Font, min 82), Milosevic y Soldado (Romeo, min 72).

Deportivo: Aouate, Manuel Pablo, Arbeloa, Juanma, Capdevilla, Barragán (Taborda, min 46), Sergio (Estoyanoff, min 46), Juan Rodríguez, Filipe (Cristian, min 65), Verdú y Riki.

Goles: 1-0 (min 4): Soldado. 2-0 (min 22): Valdo. 2-1 (min 29): Juan Rodríguez. 3-1 (min 59): Soldado. 4-1 (min 91): Savo Milosevic.

Árbitro: Iturralde González (Colegio Vasco). Amonestó a Puñal, Cruchaga, Nkounam, Josetxo, Juanma y Taborda.

Un inofensivo Deportivo se dejó caer ayer por Pamplona sólo para hacer el ridículo. El equipo de Joaquín Caparrós  fue una caricatura de sí mismo y se vio superado siempre por el equipo navarro, que  propinó a los gallegos el primer mazazo antes del minuto cinco, por medio de Soldado.

Sólo Riki, con un disparo al poste, sacó a los blanquiazules de un letargo en el que volvió a caer con el 2-0, obra de Valdo. Osasuna se relajó algo y el andaluz Juan Rodríguez lo aprovechó para acortar distancias tras una embarullada jugada.

El 2-1 hizo crecer un poco al Depor, aunque tímidamente y sin profundidad alguna en ataque.

Ya en la segunda mitad, con el uruguayo Taborda  como segundo punta, Verdú haciendo de Sergio y Estoyanoff intentando mejorar las prestaciones de Barragán por la banda, los inquilinos de Riazor buscaron el empate con una mayor insistencia.

Soldado sentenció

Ni el Deportivo inquietaba ni Osasuna sufría en una película que tuvo a Soldado como protagonista principal.

El ex delantero del Real Madrid rebanó un esférico a Juan Rodríguez y lanzó un zapatazo que dejó helado a Aouate: 3-1 y todo visto para sentencia. La media hora restante fue una fiesta  que cerró Milosevic con el 4-1 final.

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