Tanto despliegue no hizo  falta, pues el Betis entregó la eliminatoria casi antes de saltar al campo. Nunca creyó el campeón en la remontada. Un cabezazo de Dani, una caída dudosa de éste ante Casillas y un paradón de aquel a disparo de Joaquín fue su bagaje ofensivo en la primera parte.

Robinho, en racha

Para colmo, la prórroga de esa última jugada le fue dañina: el córner bético lo paró Casillas, que lanzó la contra: Iker-Zidane-Beckham y Robinho. En velocidad, el brasileño desbordó a Varela, colocando el balón junto al palo. Era su cuarto gol en cinco partidos. Mejor regalo a su cumpleaños, 22 tiene ya, imposible.

El Betis siguió de rebajas en la segunda mitad, generando ocasiones en su portería que el Real Madrid no supo aprovechar. Y así pasó el tiempo y acabó el partido con idéntico resultado que en la ida y el anhelo madridista más cerca. Ya en semifinales.

El Valencia-Deportivo, suspendido

La noche copera, en la que el Espanyol pasó tras ganar al Cádiz (2-0), estuvo marcada por la suspensión del Valencia-Deportivo. Sucedió en el minuto 44, después de que Villa marcase el 1-0 que igualaba la eliminatoria. En ese momento, el asistente de Megía Dávila, Vicente Egido Rojas, recibió el impacto de un objeto que le abrió un corte en la ceja. Acto seguido, el árbitro suspendió el choque, que se reanudará cuando decida hoy Competición, que incluso podría dar la eliminatoria por perdida al Valencia.