Si hay un partido que centra la atención futbolística este fin de semana, ese no es otro que el Real Madrid - Getafe. La vuelta de Míchel al coliseo blanco, el reencuentro Pepe-Casquero, la polémica Pellegrini-Guti y como recibirá el Santiago Bernabéu a su equipo tras la debacle de Alcorcón son motivos suficientes para no perder detalle del encuentro.

Tras un prometedor inicio de campeonato, aunque solo fuera por los resultados y por los espectaculares registros goleadores de los madridistas, la lesión de Cristiano Ronaldo parece haber deshecho el castillo de naipes que era el Real Madrid. La humillante derrota en Alcorcón no va a ser fácilmente olvidada por el exigente público del Bernabéu, que esperará una reacción inmediata y juzgará sin piedad a su equipo.

Para el partido, Manuel Pellegrini ha decidido no convocar a Guti. El chileno aduce que el canterano sale de una lesión y que no está al 100%, mientras que el centrocampista asegura estar en perfectas condiciones. El castigo al genial y polémico jugador por la discusión en el partido de la Copa del Rey parece claro, pero desde el club parece que se intenta maquillar de manera incomprensible.

Vergonzosa agresión

En el campo, la atención también estará dirigida a Pepe y Javier Casquero. Todo el mundo recuerda la vergonzosa agresión del central al medio azulón la temporada pasada, en una de las mayores 'idas de olla' que se recuerdan en un campo de fútbol. Fue hace hace algo más medio año, un 21 de abril de infausto recuerdo para el luso y que le costó cinco meses apartado del campeonato liguero.

Pepe pidió perdón y parece que el getafense aceptó las disculpas, pero habrá que comprobar cómo será el reencuentro, pues una agresión de ese calibre es difícil de olvidar.

13 años después

Vuelve al Bernabéu uno de los grandes ídolos del madridismo. 13 años han pasado desde la última vez que Míchel pisó el coliseo blanco en un partido oficial. Fue en su despedida como jugador blanco ante el Mérida y desde entonces no había tenido la oportunidad de regresar como profesional.

Su vuelta se produce como entrenador del Getafe y ocupará el banquillo de visitante por primera vez en su vida.