Un punto sabe a poco

El Málaga mereció ganar ante un Castellón que se dedicó a defender y crear peligro a la contra.
El Málaga mereció más en su partido de ayer ante el Castellón. (José Ortega)
El Málaga mereció más en su partido de ayer ante el Castellón. (José Ortega)
El Málaga mereció más en su partido de ayer ante el Castellón. (José Ortega)
La Rosaleda: 14.000 espectadores.

Málaga Arnau, Gámez, Jesule, Silva, Valcarce, Perico (Edgar, m.53), Sandro, Francis (Popo, min 53), Jonathan Valle, Armando y Salva.

Castellón Oliva, Pedro, Dealbert, Aurelio, Baigorri, Xavi, Rodri (Mora, min 75), Castel (Pendín, min 66), Natalio (Txiki, min 69), Mario Rosas y Nakor.

Árbrito Alexis Pérez Pérez, Colegio Canario. Amonestó a los locales Francis y Salva y a los visitantes Pedro, Rodri, Natalio y Baigorri.

El Málaga mereció sumar algo más que un punto en su choque de ayer ante el Castellón en La Rosaleda.

El equipo de Juan Ramón Muñiz se mostró más ambicioso que su rival y arrancó con fuerza. Ya en el minuto dos, una falta botada por Sandro se estrelló en el palo tras un remate de Salva. El rechace lo recogió el propio Salva y lo envió contra el cuerpo del portero. Agazapado atrás, el Castellón pudo empatar Natalio con un fuerte disparo detenido por Arnau. De ahí al descanso, Oliva fue el gran protagonista.

El meta castellonense detuvo, en el minuto 19, una falta directa de Sandro a la escuadra y, al filo de la media hora, desvió un libre  directo de Jonathan.

En la segunda mitad, el Málaga siguió dominando. Salva tuvo una buena oportunidad en el minuto 61, pero Oliva, insuperable durante toda la tarde, volvió a detener.

Por su parte, los visitantes se acercaron a la puerta blanquiazul en tan sólo una ocasión, pero lo hicieron con un enorme peligro. Fue en un contraataque culminado con una vaselina de Mario Rosas sobre la salida de Arnau, que acabó estrellándose en el travesaño.

El filial pierde ante el Villanueva

El Málaga B cayó ante el Villanueva de Córdoba en Benalmádena por 1-3, con una actuación muy desacertada del colegiado Sánchez Ramos, que cuando el filial ganaba (1-0, gol de Ador en el minuto 2) pitó un penalti inexistente que propició el empate, expulsando injustamente a Luija. El segundo tanto de los visitantes fue en un tremendo fuera de juego.

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