Alonso, que no criticó la maniobra de su compañero (al menos no públicamente), defendió como pudo esa tercera plaza ante los  ataques de Kimi, mientras que por delante se escaparon Felipe Massa, pole, y Hamilton, cuyo McLaren fue ayer mucho más rápido que el del español.

La situación de carrera se rompió en la primera parada en boxes porque   Raikkonen fue más rápido en el repostaje y adelantó a Alonso.

Rival inesperado

La carrera se complicó aún más para el campeón del mundo cuando el BMW de Nick Heidfeld se le coló en una curva y le relegó a la quinta plaza. Sus intentos por recuperar terreno fueron en vano: «El coche nunca me ha dejado ir cómodo. He hecho todo lo que he podido», afirmó.  Ganó Massa, por delante de Hamilton y Raikkonen.

24 carreras sin bajar del podio

El quinto puesto de ayer puso fin a una gran racha de Fernando Alonso, que en las últimas 24 carreras que había logrado terminar siempre había pisado el podio. Pese a todo, el asturiano mantuvo el optimismo: «Si se hace un drama de una quinta posición y de estar líder del mundial, vamos muy mal. Hace cuatro o cinco años no teníamos nada, y a lo mejor dentro de diez tampoco. Hay que conformarse con lo que tenemos y saber que estamos líderes».