El entrenador del FC Barcelona, Pep Guardiola, ha extremado su mensaje de prudencia en la rueda de prensa previa al enfrentamiento de Champions frente al Copenhague, un equipo "durísimo" que planteará "un partido terrible en todos los sentidos", por lo que el conjunto azulgrana deberá completar "una actuación soberbia" para lograr el triunfo.

"Nos espera un partido terrible en todos los aspectos. El Copenhague es un equipo durísimo, físicamente muy fuerte y muy rápidos a la contras. Necesitamos una actuación soberbira para llevarnos los tres puntos. Es un partido decisivo para dar un paso adelante firme en la Liga de Campeones", señaló Guardiola.

El técnico azulgrana avisó de que el equipo danés "ha demostrado que es muy fuerte en casa" y que el hecho de que sea el vigente campeón de liga "demuestra que es muy buen equipo". En este sentido, Guardiola recordó que "en los dos últimos años" su equipo "solo" se ha medido a campeones de otras ligas.

"Las cosas se dan por hechas, te tocan estos equipos en el sorteo y ya está hecho. Hay otras ligas que también existen y que hacen cosas muy, muy bien", argumentó el entrenador, que valoró como "un gran éxito" la posible clasificación para octavos de final, ya que permitiría "aparcar la competición haste febrero", lo que aportaría "tranquilidad en muchos aspectos".

Guardiola, que cree que el Copenhague ocuparía "la parte alta de la tabla" si jugara la liga española, descartó que el gran partido contra el Sevilla garantice un buen resultado este martes. "Ganar siempre influye positivamente, pero mañana no tendrá nada que ver", advirtió antes del choque con "otro equipo muy fuerte" como era el Sevilla.

Además, el preparador fue interpelado por Xavi Hernández y Leo Messi. Del primero dijo que es "muy buena señal" que acabara el partido contra el Sevilla sin molestias físicas, aunque avisó de que todavía "no está solucionada" la tendinitis del centrocampista. Respecto al argentino, Guardiola reiteró que es "un jugador especial de los que hay muy pocos".