Esconde la pelota, conduce con elegancia y siempre está para dar el último pase. Mesut Ozil es uno de los grandes fichajes del Real Madrid en la última década. Su autoestima le lleva siempre a pedir la pelota. Nunca se esconde y tiene llegada. Ozil ha vuelto. Justo cuando más le necesita el equipo para asegurar la posesión del balón. Al lado de Granero y Xabi Alonso, en los dos últimos partidos, el invento le funciona a José Mourinho.
El alemán impulsó al Real Madrid hacia el título de Liga al liderar el triunfo ante el Real Zaragoza (3-1), aventajar ya a siete puntos al FC Barcelona del argentino Leo Messi.
Mesut se ha convertido en el mejor pasador del equipo, con 15 asistencias de gol. Y todo en este nuevo, año. En enero, Ozil se ha consolidado en el equipo titular, y los números habnlan por sí solos: ha dado cinco asistencias, ha marcado un gol. Solo ha sido suplente en tres partidos, entre ellos, el de la ida de Copa ante el Barça, y el Madrid lo acabó pagando caro.
Ozil lidera el cambio del Real Madrid. Un equipo ofensivo (70 goles), que le ha demostrado a Mourinho que puede hacer mejores cosas que cualquier otra probatura del portugués.
Y, precisamente, la conexión con Kaká (en teoría, su rival por un puesto en el once) es la mejor noticia para Mourinho. Juntos, hacen que el juego de este Madrid de los 'jugones -no hay que olvidar a Granero- sea más vistoso.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios