Otro mordisco del Lyon

El Real Madrid remontó un 0-2 y desperdició un penalti,  pero pagó cara
una pésima primera mitad.
Los jugadores del Madrid discuten con Juninho. El partido acabó con mucha tensión.(EFE)
Los jugadores del Madrid discuten con Juninho. El partido acabó con mucha tensión.(EFE)
Los jugadores del Madrid discuten con Juninho. El partido acabó con mucha tensión.(EFE)
Santiago Bernabéu: 65.000 espectadores.

Real Madrid Iker Casillas, Sergio Ramos, Iván Helguera, Cannavaro, Roberto Carlos, Emerson (Cassano, min 75), Diarra, Raúl, Guti (Reyes, min 20), Robinho y Van Nistelrooy.

Olympique Lyon Coupet, Reveilliére, Cris, Squillaci, Abidal, Clerc, Toulalan (Diarra, min 90), Tiago, Juninho Pernambucano, Malouda y Carew.

Goles 0-1 (min 12): Carew. 0-2 (min 31): Malouda. 1-2 (min 39): Diarra. 2-2 (min 83): Van Nistelrooy.

Árbitro Terje Hauge (Noruega). Mostró cartulina amarilla a Toulalan, Reveillére, Juninho, Malouda, Roberto Carlos, Cannavaro, Raúl y Ramos.

Cualquier atisbo de mejoría en el juego del Real Madrid (llevaba dos jornadas seguidas goleando en la Liga) lo borró anoche en media hora el Olympique de Lyon, un equipo especializado en producir dolores de cabeza a la afición blanca y que apunto estuvo de provocarle ayer una jaqueca de las gordas.

Antes del partido, el Bernabéu soñaba con devolver a los franceses el golpe encajado en la ida en Lyon (2-0) y apropiarse de la primera plaza de grupo ganando por más de dos tantos. Sin embargo, pronto se vio que el conjunto galo no estaba dispuesto a aceptar el guión, a pesar de sus bajas en la delantera.

El Lyon demostró que tiene recursos suficientes para poner en apuros a cualquier defensa y más aún si se trata del Balón de Oro, Fabio Cannavaro. El italiano fue un agujero constante en la defensa del Madrid y eso lo aprovechó el suplente Carew, ayer enorme, para acosar a Casillas en la primera mitad. Fruto de ese acoso llegaron su tanto, el de Malouda y los pitos del Bernabéu. Sólo el gol de Diarra, al cabecear un córner, evitó una pañolada en el descanso.

La segunda parte comenzó con un Madrid más centrado, aunque las contras francesas siempre fueron peligrosas. Tras otra jugada a balón parado, Van Nistelrooy empató y casi al final el holandés evitó el triunfo del Madrid al fallar un penalti, como ya hizo ante el Steaua. El equipo de Capello dejó ayer muchas dudas y se despidió del liderato de grupo.

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