El Barça alcanzó ayer un acuerdo con Juan Carlos Navarro para que el escolta catalán pueda negociar su traspaso a algún equipo de la NBA. Hasta ayer, el contrato de la Bomba Navarro incluía una cláusula de penalización por la que el jugador debía pagar diez millones de euros en caso de marcharse a la Liga estadounidense. «El Barça quiere facilitar la salida de Navarro para que juegue en la mejor Liga del mundo», aseguró el club azulgrana. Los derechos de Navarro en la NBA son de los Washington Wizards, equipo que lo drafteó en 2001, pero que nunca quiso pagar los diez millones de euros de su cláusula.