El argentino David Nalbandian condicionó su presencia en la final de la Copa Davis, que jugarán Argentina y España, al apoyo de los dirigentes de su país, molesto porque la serie decisiva no se jugará en la ciudad de Córdoba, como el tenista pretendía, sino en la de Mar del Plata.

"Espero que la Asociación Argentina de Tenis (AAT) siga apoyando a los jugadores como dijeron en un principio. Si no, veremos si juego", advirtió Nalbandian en una entrevista que publica hoy el diario Clarín.

El jugador confesó estar muy molesto por la decisión de la Federación Internacional de Tenis (FIT) de elegir como sede de la final Mar del Plata y no Córdoba, capital de la provincia homónima, en la que nació el hoy ganador del Abierto de Estocolmo.

Tanto Nalbandian como el resto del equipo argentino habían expresado su intención de jugar la final en esa ciudad para aprovechar su ubicación, a 600 metros de altitud sobre el nivel del mar.

Cuando prácticamente se daba por hecho que Córdoba albergaría la final, la FIT optó este viernes por Mar del Plata, propuesta por la AAT como segunda posibilidad, lo que provocó el enojo de Nalbandian.

El cordobés incluso ha enviado una carta a la AAT pidiendo explicaciones.

"La AAT dijo que iba a ser lo que quisiéramos los jugadores y quedó claro que no fue así. Por lo tanto queremos preguntar los motivos. Todo fue muy raro", dijo Nalbandian, quien en su primera reacción opinó este viernes que había "algo por debajo de la mesa" para adoptarse esa decisión.