La hora del descanso y la tranquilidad llegó temporalmente para el campeón olímpico estadounidense, el nadador Michael Phelps, que regresó a su casa de Baltimore después de haber deslumbrado en los Juegos de Pekín y completar una gira por todo el mundo y a través de su país.

Al margen de llegar para descansar unos días, Phelps, que ganó ocho medallas de oro en los pasados Juegos Olímpicos, también recibió otra donación de 250.000 dólares para su fundación, esta vez concedida por la compañía de cereales "Kellogg's".

"Deseaba volver a Baltimore, lo extrañaba", comentó Phelps después de haber recibido la donación que une a otra de un millón que el mismo se comprometió a dar con los premios que recibiese. "Es el lugar donde crecí y comencé cada una de las metas que he logrado".

Phelps dijo que su mayor alegría era volver a estar en su casa, junto a su familia y amigos.

Kellogg's le mostró a Pelphs por primera vez la caja de cereales en la que han puesto su imagen y definió el trabajo como "Increíble".

Quiere tranquilidad

Aunque Phelps no va a permanecer por mucho tiempo en Baltimore, de hecho se quedó en casa de un vecino, para viajar este fin de semana a otra presentación, dijo que pronto va a tener la tranquilidad que desea para disfrutar de lo conseguido en Pekín.

"Llevo ya un tiempo que a veces no sé ni en que día vivo, y lo único que puedo asimilar es el lugar donde me encuentro", comentó Phelps.

Desde que dejó Pekín con ocho medallas de oro en su poder, la mejor marca de todos los tiempos para cualquier atleta, Phelps ya ha viajado a Londres, participó en un desfile en Disney World, en Orlando (Florida) y se ha presentado en los programas de televisión más importantes.

Su hazaña también le ha permitido reunirse con políticos, estrellas de cine y figuras de otros deportes.

Phelps dijo que todos los momentos habían sido muy interesantes y especiales, dado que nunca pensó que podría vivir esas circunstancias.

"Todo se ha dado tan rápido que se parece a una montaña rusa", destacó Phelps durante la rueda de prensa que ofreció en el Centro Acuático Meadowbrook, donde a los siete años comenzó a nadar y que ahora quiere comprar.