De partida salió mejor el equipo blanquiazul, con las ideas más claras. Un remate de Salva en el primer minuto pudo poner de cara muy pronto las cosas para el Málaga. La expulsión de Anderson puso un poco contra las cuerdas a los malagueños, que intentaban llegar al área de Aouate con balones largos destino Salva. En una de esas, el delantero peinó un balón hacia Navas, que marcó de cabeza.

Seis minutos de alegría

La alegría duró seis minutos. Al filo del descanso, Casquero superó a Arnau de tiro cruzado y estableció las tablas. En la reanudación se sucedió el carrusel de expulsiones, en el que entraron Gerardo y tres jugadores del Racing. El partido estaba roto y todos dieron por bueno el empate.