Después de protagonizar uno de los sucesos más criticables del Mundial de Brasil, el de su mordisco a Chiellini, y de abandonar el torneo tras recibir un castigo de la FIFA de nueve partidos con su selección y cuatro meses de inhabilitación, Luis Suárez busca la redención. O algún tipo de perdón.

El delantero uruguayo del Liverpool emitió un comunicado fechado este lunes en el que mostró su  malestar con su actitud, admitió el mordisco y pidió perdón.

"Me arrepiento profundamente", comentó Suárez en uno de los tres puntos que destacaba su misiva. "Pido perdón a Giorgio Chiellini y a toda la familia del fútbol", apuntó después. Y anunció: "Me comprometo públicamente a que nunca volverá a ocurrir un incidente como este con mi intervención".

El ariete charrúa explica el porqué de sus palabras: "Después de uso días de estar en casa con mi familia he tenido la oportunidad de recuperar la calma y de reflexionar sobre la realidad de lo que sucedió en el partido Italia-Uruguay celebrado el 24 de junio de 2014".

Giorgio Chiellini, por su parte, aceptó las disculpas ofrecidas por el uruguayo a través de una red social y confió en que la FIFA reduzca su castigo:

Por otro lado, un equipo de la primera división de fútbol de Kosovo pretende que el delantero internacional uruguayo Luis Suárez sea cedido por el Liverpool para jugar en sus filas durante los cuatro meses que dure su sanción. El modesto equipo Hajvalia ofrece 30.000 euros al equipo inglés por la cesión y pagaría 1.500 euros mensuales a la estrella charrúa, que podría jugar así en Kosovo, un territorio que no ha sido aceptado por la FIFA.

"Suárez no puede jugar en los próximos cuatro meses. Sin embargo, ya que no se nos reconoce internacionalmente, creo que podría jugar en Kosovo y hemos preparado una oferta que enviaré al Liverpool", señaló al diario kosovar Sports Plus el director deportivo del equipo, Xhavit Pacolli.

Esa modesta cantidad para una estrella como Suárez "es lo máximo que podemos ofrecer", subrayó. "Quizá le parezca ridículo, pero es todo lo que podemos ofrecer", agregó.

El Hajvalia, que tiene su sede en el barrio del mismo nombre de la capital kosovar, Pristina, quedó en séptima posición la pasada temporada en la Superliga kosovar, en la que compiten doce clubes.