La selección de Argentina logró poner un cierre digno a la Copa América al derrotar a Chile en la final de consolación (2-1). La albiceleste se impuso gracias a los goles de Agüero y Dybala en la primera mitad, ya que el tanto de Alexis Vidal de penalti no fue suficiente para los chilenos. En cualquier caso, el encuentro estuvo marcado por la expulsión de Leo Messi.

Corría el minuto 36 cuando Messi recibió una falta del defensa chileno Gary Medel. El argentino entró en la provocación de su rival y se encaró, por lo que el árbitro paraguayo Mario Díaz de Vivar decidió mostrar la tarjeta roja a ambos jugadores.

Se trata de la segunda expulsión de Messi en los más de 800 partidos que ha disputado como profesional entre el FC Barcelona y la selección. La primera roja también la vio con Argentina en un partido que difícilmente olvidará, pues ocurrió en su debut con la albiceleste.

La expulsión de Messi en el encuentro frente a Chile hizo que el público congregado en el Arena Corinthians de Sao Paulo protestara la decisión arbitral, ya que los aficionados entendían que su reacción no era merecedora de la tarjeta roja.