Los Angeles Lakers sumaron su segunda victoria consecutiva tras una negativa racha de tres choques sin vencer. La figura del escolta Kobe Bryant esta vez mostró la mejor versión de liderazgo y director en el juego de Lakers que llegaron a Phoenix para conseguir la victoria por 96-102 ante los Suns en el duelo de equipos punteros de la División Pacífico.

Bryant volvió a mostrar que cuando juega para que el resto del equipo también participe en las acciones y hacen una gran defensa es muy difícil que puedan perder un partido, aunque enfrenten tengan al mejor equipo encestador de la liga.

El escolta estrella de los Lakers aportó 20 puntos, 10 rebotes y ocho asistencias que pudieron compensar las siete perdidas de balón que cometió después que los otros cuatro titulares de los Lakers acabaron con dobles dígitos. Los Suns no vendieron fácil su derrota después de llegar estar abajo 15 puntos en el marcado en la segunda parte y al comienzo del cuarto periodo consiguieron ponerse por delante.

Pero los Lakers reaccionaron para recuperar la ventaja y ya no perderla por el resto del partido, del que fue expulsado el entrenador de los Suns, Alvin Gentry, que se encargó con el árbitro Mike Callahan al no pitar una falta durísima que cometió el ala-pívot español Pau Gasol sobre el reserva Lou Amundson.

La decisión del árbitro enfureció aun más a Gentry que se fue a buscarlo, mientras que sus entrenadores asistentes lo tuvieron que sujetar para que las acciones no fuesen a mayores cuando faltaban 5:06 minutos para concluir el partido.

Gasol jugó 37 minutos para anotar 7 de 11 tiros de campo y 1-5 desde la línea de personal, capturó ocho rebotes, puso cuatro tapones, dio tres asistencias y recuperó dos balones, siendo clave en el juego defensivo de los Lakers.