El delantero de Ibero y Eulate consiguieron ayer en el frontón Ogueta de Vitoria la txapela que les acredita como los mejores del Campeonato de Mano Parejas. Es la segunda para Irujo, en su tercer año como profesional, y la primera para Eulate, en su primera participación en el campeonato de primera categoría. Toda una hazaña.

En el lado contrario, Olaizola II y Zearra, los favoritos, se quedaron en el cartón 11. O, mejor dicho, dejaron que los campeones se fueran directamente del 9-11 al 22-11.

Aimar Olaizola, que había empezado con un buen tono en defensa, terminó fallón y convertido en un muñeco, movido al ritmo que marcaban los contrarios. Irujo, bien secundado por Eulate, impidió, además, que Olaizola cerrara un año completo de triunfos con la única txapela que le falta.

Pero ayer, Irujo debía tener aún clavada la espina del Manomanista, en el que perdió la final contra Aimar porque se echó encima el peso del partido y remató tantos casi inverosímiles. Ganchos desde el cuadro 4, extraordinarios sotamanos de zurda, voleas al ancho... Así hasta 15 tantos. manuel romero