La última semana del Giro entró con pena en el corazón del pelotón por el fallecimiento de Xavi Tondo y, tras una jornada de descanso, se dispone a afrontar la recta final con la discusión por el segundo puesto, ya que Alberto Contador, con un dominio claro, es el indiscutible "capo" de la carrera rosa, tal y como admiten sus rivales.

Parece que los enemigos de Contador se han hecho a la idea de que el ciclista español está intratable, por lo que ya hablan de discutir la segunda plaza. La versión más ofensiva del triple ganador del Tour ha arrojado grandes dividendos y podrá afrontar las seis últimas etapas con un colchón considerable.

Diferencias de 4.20 minutos respecto al segundo clasificado, el italiano Michele Scarponi (Lampre), y de 5.11 al tercero, Vincenzo Nibali (Liquigas), el vencedor de la Vuelta.

Nibali, a priori rival número uno, camina resignado a su suerte. Ha cambiado el planteamiento de sus objetivos tras padecer en sus propias carnes el estado de forma de Contador. "Inabordable", según el jefe de filas del Liquigas. Y añade que ahora se va a centrar "en el segundo puesto,". Se conforma con ser superado solo por el más fuerte. "No sería una derrota", dice.

Asó lo manifestó el ciclista siciliano, el "Tiburón", quien trató de asestar una dentellada a Contador en el descenso de la Marmolada. Su intención era poner en práctica el único sistema que ve posible para sorprender al español.

Pero el invento solo le sirvió para ser víctima de otro latigazo del líder, que se maneja en este Giro con ambición, desde el aviso de Tropea al tercer puesto bonificado de Gardeccia, pasando por el vuelo sobre el Etna y el Grossglockner.

Se prevé buen tiempo para la 'maglia' rosa, pues el recorrido seguirá marcado por la montaña hasta la cita cronometrada final de Milán. Contador seguirá en su terreno, "viendo qué hacen los demás". Restan tres finales en alto y dos jornadas de media montaña.

Para empezar la cronoescalada entre Belluno y Nevegal, de 12,7 kilómetros, buena oportunidad para dejar sentenciado el segundo Giro del ciclista de Pinto, decidido a empatar a dos victorias con Miguel Induráin.

Las siguientes etapas no podrán asustar a nadie, máxime después del tríptico en los Dolomitas, que fue un castigo para el pelotón, reducido a 166 unidades. De Venaia Reale salieron 207 corredores.

Pero la penúltima jornada promete espectáculo en el recorrido entre Verbania y Sestriere, con el ascenso a La Finestre, que incluye 8 kilómetros de superficie de tierra, el famoso y polémico "sterrato". En la meta de Sestriere debe estar definida la foto del podio final.

El Giro descansó entre las montañas dolomíticas. Sus paisajes de postal acompañaron los cortos entrenamientos en la mayoría de los equipos. Las piernas sienten los efectos de dos semanas de competición. La lucha por el segundo puesto se reanuda. Contador despega hacia Milán.