¿Le llega en buena hora?

Ser seleccionador español siempre es bien recibido y un orgullo.

¿Ha hablado con Pesquera?

Aún no. Ni tampoco con ningún jugador.

¿Qué hay que hacer para contar con Gasol y Calderón?

En principio, hacer la petición y que sus equipos (Memphis y Toronto) decidan.

De no ser así, ¿trastocaría mucho sus planes?

Para nada. Lo ideal es que jugaran. Si no es así, seguimos contando con muy buenos y válidos jugadores para hacer algo importante.

¿Se acostumbrará un hombre de club a la selección?

Todos los vestuarios son parecidos, aunque debo reconocer que el combinado nacional es algo más.

¿Cuál es su filosofía?

Apostaré por el bloque.

¿Hay mimbres para el oro?

Sin duda. En Japón aspiraremos a lograr lo máximo.

¿Se afeitaría la barba si ganamos el mundial?

Ni se me ha pasado por la cabeza esa idea.

Como fumador reconocido, ¿cómo lleva la nueva ley?

De momento, sin problemas. La aceptamos y punto.

¿Por qué abandonó el periodismo?

Decidí que el Ramiro me tiraba más que esa profesión. Me la jugué en aquella época en la que ser entrenador de baloncesto no estaba de moda.

¿Le gustaría volver?

No me importaría algún día. Tuve la oportunidad de hacer unas prácticas en Radio Madrid y fue una gran experiencia.

¿A quién desearía haber entrenado?

Hay muchos jugadores interesantes, pero el malogrado Fernando Martín tenía una fuerza especial.

BIO

Nació en Madrid el 11 de febrero de 1958. Con 15 años debutó como técnico en la cantera colegial. Ganó una Copa del Rey (1999/2000).