La foto del saludo de ambos, sonrientes, con complicidad y alegría, ha dado la vuelta al mundo. Son Joseph Tidd, de apenas dos años, y Carson Pickett, jugadora de los Orlando Pride de la primera división femenina de Estados Unidos.
Los dos nacieron sin antebrazo izquierdo, una condición que, tal y como explica a madre del niño, en un principio agobió a todos, pero que, con la ayuda de familia y amigos, han logrado normalizar.
"Su hermana le dijo que tenía una aleta de la suerte, como en 'Buscando a Nemo", explica la madre en una entrevista. El niño es feliz y hasta tiene una cuenta en Instagram donde le apoyan más de 7.000 personas.
Pickett, por su parte, ha derribado barreras en el deporte y ha hecho carrera en el 'soccer' femenino de Estados Unidos: "El fútbol es lo máximo para mí, pero la plataforma que me proporciona para que pasen cosas como esta se lleva la palma", dijo, tras conocer a Joseph.
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