En un lugar de Londres, ayer, tuvo lugar una reunión que podría alterar todo el mercado de fichajes europeo de este verano.

El jugador del Arsenal Cesc Fábregas informó a su entrenador y mentor, Arsene Wenger, que el Real Madrid quiere ficharle y él está tentado por la oferta. "Eres el jefe del proyecto y el ídolo de la afición, quédate al menos este año", le vino a pedir Wenger.

El español no respondió a su entrenador al instante. Se tomará tres o cuatro días para decidir su destino y entonces lo hará público. Muchos estarán atentos a las palabras de Fábregas. De su decisión final puede depender el futuro de muchas estrellas de fútbol europeo. Tras un primer periodo marcado por las

En cadena

Si finalmente Cesc llega al Real Madrid, el Arsenal no se quedará quieto, con el dinerito fresquito de la venta de Fábregas (25 millones) y Henry (26). El objetivo londinense se llama Samuel Eto'o, pretendido también por el Chelsea de Abramovich.

Continúa la cadena: si Eto'o llega al Chelsea, Shevchenko (harto de su todavía equipo) podría salir de Inglaterra con destino Milan y cedido, lo que ahorraría a los italianos los 45 millones que tienen preparados para su fichaje.

Liberado de ese pago, el dueño milanista, Berlusconi, podría hacer realidad su fantasía: Ronaldinho, pagando los 125 millones de su cláusula, como ya asegura ayer el diario ‘As’.

La secuencia terminaría con el Barça forrado literalmente con los dos traspasos de sus estrellas, Eto'o y Ronaldinho. Y entonces, ¿qué mejor inversión que fichar a Kaká y, ya de paso, hacerle la puñeta al eterno rival? Continuará...