El "Periódico de Catalunya" desvela en su edición del martes que Laura Guzmán, una niña de 14 años, ha denunciado a Ramón Pérez, entrenador del equipo cadete femenino de fúbol siete del Barcelona, por darle una patada en las costillas.

La agresión tuvo lugar el pasado domingo tras el encuentro que disputaron los cadetes femeninos del Barcelona y el Europa, equipo en el que milita la menor agredida.

Tras el encuentro, Ramón Pérez habría propinado una patada a la jugadora Laura Guzmán, que anteriormente había militado en la entidad azulgrana.

La niña fue internada en el hospital de Sant Joan de Deu, aunque fue dada de alta 24 horas después tras comprobarse que sufre una fuerte contusión en el abdomen. Ahora deberá guardar reposo una semana.

Desde la habitación del hospital, Guzmán cuenta cómo se produjo la agresión: "Al final del partido, el técnico me pegó una patada en las costillas cuando salí del vestuario".

La madre de la jugadora denunció los hechos en la comisaría. Los padres adjuntaron el parte médico del hospital.

El Barcelona no ha tardado en reaccionar y ha abierto un expediente a Ramón Pérez, al que de momento ha suspendido de empleo y sueldo a la espera de que concluya la investigación.

El técnico ha negado los hechos, pero son varios los testigos que corroboran la versión de la joven agredida.

El club azulgrana ya ha dicho que será "inflexible" con el técnico si se confirma la agresión. El Barcelona confirmó a EFE que tanto el directivo que se encarga del fútbol base,

De Bode, por su parte, calificó de "muy grave" el incidente, aunque destacó que no afectará a las "cordiales relaciones" que mantienen ambos clubes.

De Bode subrayó a EFE que la denuncia de la familia de Laura Guzmán "no es contra el Barcelona, sino contra la persona del agresor" y se mostró convencido de que el caso pueda servir "como ejemplo de lo que no debe hacer un entrenador que también es educador, y además, de un club tan emblemático".

Fuentes del Europa aseguraron a EFE que Ramón Pérez ya protagonizó hace varias semanas otro incidente -sin violencia física- con unos de los responsables del fútbol base del Europa durante un partido de fútbol femenino.

Ramón Pérez se defiende

El técnico habló en los micrófonos de Radio Marca para apuntar, entre lágrimas, que él no había agredido en ningún caso a la niña y que la joven había sido expulsada del Barcelona antes de que él llegase.

Concretó que fue echada del equipo azulgrana por pintar los vestuarios amenazando a compañeras y metiéndose con ellas. Ramón Pérez señaló que era una "niña conflictiva" y que no se cree todo lo que le está ocurriendo porque en ningún momento le pegó.