El clásico entre el Barcelona y el Real Madrid se jugará finalmente el lunes 29 de noviembre a las 21.00 horas.

El partido, que se juega en el Camp Nou, coincide en fecha con las elecciones catalanas, por lo que se han estado barajando varias fechas para su celebración. A pesar de que el domingo 28, a las 22.00 horas, parecía la fecha en la que se disputaría, finalmente lo hará un día después, el lunes.

Se ha puesto el lunes por motivos de seguridad. Todas las partes implicadas, señala la LFP, han buscado la mejor solución por la confluencia de estos dos importantes eventos.

Será el partido que cierre la decimotercera jornada de Liga. Este día, atípico para que se juegue uno de los partidos más importantes de la Liga, no era del agrado de muchos. Jorge Valdano y Víctor Valdés ya mostraron su desacuerdo con que el partido se jugara un lunes.

Mas espera un 'doblete'

El candidato de CiU a la presidencia de la Generalitat, Artur Mas, ha celebrado la elección del lunes 29 de noviembre como fecha del Barça-Madrid, porque no coincide con la noche de las elecciones al Parlament, y ha expresado su esperanza de lograr un "doblete" electoral y futbolístico en menos de 48 horas.

Mas, culé declarado, ha aprovechado un desayuno-coloquio del Fórum Europa en Barcelona para valorar la decisión de organizar el clásico un día después de los comicios catalanes: "Eso supone que podré ir al campo. Si lo hiciesen el domingo por la noche no podría ir", ha bromeado el líder de CiU, que se había mostrado partidario de desplazar el partido ya fuese al sábado 27 o al lunes 29.

"Me parece que cuando en un país hay dos eventos tan importantes y singulares no pasa nada si se hacen en días diferentes. Todo el mundo podrá seguir y participar con más afición en ambos eventos", ha reflexionado Mas, antes de añadir: "Imaginaos si además hacemos el doblete...", en referencia a una posible victoria electoral de CiU y un triunfo de los azulgranas frente a su eterno rival.