El Sporting Mahonés es un equipo del Grupo XI de la Tercera División balear que aún no sabe lo que es ganar en las ocho jornadas de Liga disputadas hasta la fecha: ha empatado cinco partidos y ha perdido tres y ocupa el puesto decimoctavo de la clasificación.

Esto no sería noticia si no fuera porque la junta directiva ha decidido tomar "medidas drásticas" para mejorar la situación: sancionar a toda la plantilla y al cuerpo técnico con una reducción temporal de sus sueldos hasta que se enderece la situación.

A través de un comunicado, el club reconoce que "no está tranquilo" con la marcha del equipo. "Por mucho que el equipo y el entrenador estén trabajando adecuadamente, aboguen por un buen fútbol, y luchen para conseguir la victoria, no es suficiente y deben aún dar más para que esta llegue".

Decisiones más relevantes

La junta directiva cree que no se están cumpliendo las expectativas y por eso recurre a una medida llamativa, aunque, advierte, reversible: "Este toque de atención en forma de sanción económica, está contemplada en el Régimen Interno del Club, y si la situación mejora y el equipo enmienda su mal inicio liguero, puede que esta sanción se revierta".

El entrenador del equipo, Juan Antonio Pérez Cabrero, acata la medida: "Es una decisión del club".

Según la directiva, este aviso "debe ser la primera piedra de toque para la mejoría de la situación deportiva del equipo. Todo lo que no sea ganar el sábado puede conllevar decisiones más relevantes".