La noche del martes, Albert Cabestany logró el título de campeón de España de Trial Indoor.

Pero el éxito no radicó ahí, sino en conseguirlo superando al actual dominador del trial mundial, su compatriota Adam Raga. El campeón atendió a 20 minutos.

¿La pronta eliminación de Raga le dejó la cosa fácil?

"Sí, la verdad es que no lo esperaba, pero allanó mucho el camino".

¿Hay que ser casi perfecto para ganarle?

"No lo creo. Yo ya he estado muy cerca de él muchas veces, quedando subcampeón mundial".

¿Hay pique entre ambos?

"En lo personal, no. Y en lo deportivo, como con todos los grandes pilotos del mundo".

¿Por qué casi todos los pilotos buenos de España salen de Cataluña?

"Es la zona en la que mejor se promociona y además cuenta con muchas empresas poderosas, como la mía".

Sin embargo, su sueldo quedará lejos del de los futbolistas...

"Da para vivir, pero ni se acerca. A veces cabrea ver la pasta que cobran ellos para el trabajo que hacen, en comparación contigo, que te estás matando cada día".

Las leyes tampoco les favorecen...

"Sí, con la protección de bosques se pasan un poco. Aquí eres famoso cuando te llaman porque has ganado algo. Si no ganamos, somos delincuentes".

¿Ve solución?

"Pues igual que los cazadores tienen su coto de caza, los pilotos de trial tendríamos que gozar de un espacio así".

¿Qué le ha pedido al año que viene?

"No hace falta que le pida nada, en enero nacerá mi hija Alanis y eso es suficiente".

¿Por la cantante? (Alanis Morrisette es su preferida).

"Ella me encanta, pero no es por eso. Me pareció un nombre muy especial y original. Nadie se llama así".