El campeón de Copa sigue tan fuerte en la Euroliga como en Málaga

El Barcelona, consciente de que la reciente conquista de la Copa del Rey supone un punto de inflexión en su trayectoria de esta temporada, se aferró a la imagen ofrecida en Málaga en su estreno de la segunda fase de la Euroliga .

En este primer encuentro tras la cita copera, los barcelonistas, lejos de sufrir resaca alguna, solventaron el duelo antes del descanso, ayudados también por el escaso potencial del rival, el Trefl Sopot polaco, la cenicienta del grupo.

La poca oposición que planteó el cuadro de Eugeniusz Kijewski no empañó sin embargo el buen trabajo realizado por el conjunto de Dusko Ivanovic.

Los pívots, pese a la baja de Mario Kasun, tienen ahora más protagonismo en el juego y ayudan, como sucedió en primer cuarto, a romper una zona que antes se les atragantaba a los azulgrana.

El Trefl Sopot apenas plantó cara durante siete minutos.  Tras tomar algo de respiro en el primer cuarto, el Barcelona volvió a la carga y empezó a encarrilar máximas, gracias en buena parte al acierto desde la línea de tres puntos de Gianluca Basile, que al descanso había convertido cuatro lanzamientos desde esa posición y anotado quince puntos.

A un minuto para el final de la primera parte las diferencias ya eran de veinte puntos (45-25) y el partido estaba decidido con más de veinte minutos todavía por delante.

Ficha del partido:

92 - Winterthur Barcelona (24+21+23+24): Lakovic (8), Navarro (4), Basile (18), Trias (15), Marconato (3) -equipo inicial-, Vázquez (15), Ukic (7), Grimau (6), Kakiouzis (11), De la Fuente (3) y Moncasi (2).

73 - Trefl Sopot (17+12+17+27): Atkins (19), Slanina (5), Dalmau (11), Masiulis (4), Besok (16) -equipo inicial-, Andersen (5), Hukic (4), Wojcik (-), Hamilton (6), Pacesas (-) y Dylewicz (3).

Árbitros: Koukoulekidis (GRE), Castano (FRA) y Viator (FRA). Sin eliminados.