De cada verano e invierno siempre se comenta que han sido los más calurosos o fríos de la historia.

Igual ocurre con demasiados atletas, calificados, con cierta alegría, como los mejores en su disciplina.

Pero Hicham El Guerrouj, que anunció este lunes en Casablanca su retirada, es muy probable que sí haya sido el más sobresaliente mediofondista.

Nacido en 1974 en Berkane, ciudad marroquí situada al nivel del mar en la frontera con Argelia, cambió el fútbol por el atletismo a los 15 años sólo para contentar a su madre, harta de la ropa sucia de su hijo.

El marroquí mide 1,78 y pesa 59 kilos, tiene las piernas larguísimas y, quien le ha visto entrenar, asegura que realiza unas series brutales a un ritmo propio de carreras de 400 o 500 metros.

Fermín Cacho: "El mejor mediofondista de la historia"

"Creo que ya no tenía la suficiente motivación para seguir entrenando y prueba de ello es que en 2005 no participó en ninguna prueba", destacó el atleta soriano.

"Tuve la suerte de participar en numerosas pruebas con él. En Atlanta 96, una caída suya fue determinante para que yo lograra la medalla de plata", indicó.

Cacho consideró que El Guerrouj ha sido el mejor mediofondista de la historia por delante del argelino Nurredín Morcelli y del también marriquí Said Auita.

Auita: "Habría podido seguir hasta Pekín"

"Ha logrado títulos mundiales y olímpicos y ha pulverizado muchos récords", recordó Auita, que junto con El Guerruj es el deportista más destacado de Marruecos en toda su historia.

La foto de Morceli

Por encima de todo, se considera "musulmán y un misionero del atletismo", que no encontró su fe deportiva hasta que se colgó el oro en los 5.000 y los 1.500 metros de Atenas 2004, algo que sólo había logrado antes el finés Paavo Nurmi en 1924.

En ese momento rompió la foto del incidente con Morceli que le llevó al suelo en la final de Atlanta 1996 y que siempre portaba consigo para recordar «por qué corro».

Méritos y dos récords

Cuatro veces campeón del mundo, atleta del año por la IAAF en 2001, 2002 y 2003, embajador de Buena Voluntad de Unicef, Príncipe de Asturias 2004... Los nombramientos y premios que ha recibido El Gerrouj son innumerables, pero lo que tardará en superarse serán sus récords del mundo en los 1.500 metros (3:26.00) y en la milla (3:43.13).

Al final El Guerrouj evitó esa última carrera la que él llama "carrera de sobra, esa en la que me ganarán y nadie me perdonará haberla corrido".