Una tatarabuela centenaria ha entrado en el Libro Guinness de los Récords al convertirse en la mujer más anciana del mundo en volar en parapente, tras arrebatarle el mérito a una chipriota de cien años que lo había conseguido en el año 2007.

Mary Hardison, de la localidad de Ogden (Utah, Estados Unidos) se embarcó en la hazaña de planear en un tándem el año pasado, como celebración de su cumpleaños. Hardison disfrutó de un vuelo sin incidencias, acompañada de un instructor, el pasado 1 de septiembre, animada por cuatro generaciones de familiares.

La anciana declaró a la prensa británica que quiso hacerlo para imitar a su hijo, quien a sus 75 años, había comenzado a volar en parapente como afición. "No quería que él hiciera algo que yo no podía hacer", dijo la centenaria mujer.

Afirmó también ante las cámaras que no se había sentido nerviosa ante el reto, puesto que anteriormente muchos otros habían planeado en el mismo medio sin incidentes. "Si es seguro para otros, también es seguro para mí", afirmó.