La Copa del Rey ha movilizado a dos de las aficiones más importantes del fútbol español, la del Sevilla y la del Atlético, que vivirán la fiesta de nuestro fútbol cada una a su manera.

Aficiones 'enemigas' desde hace años, esta vez les toca verse las caras en la final de Copa en Barcelona, donde el Sevilla busca de nuevo un título tras un par de años de sequía y el Atlético ansía el doblete después de conseguir la Europa League hace apenas una semana.

Ninguno de los dos equipos estará solo. "Viajamos tres autobuses desde Madrid. Vamos 182 colchoneros con entradas para la final", cuenta a 20minutos.es Juan Carlos, presidente de la Peña Patones. "Salimos a las 4 de la mañana y tenemos previsto juntarnos todos en la plaza de España de Barcelona. Allí pasaremos el día junto al resto de atléticos".

Por su parte, las chicas de la Peña Femenina 'Hasta la Muerte' no se quedan atrás. "Vamos casi todas. Tres cuartos de la peña viajará a Barcelona a animar al Sevilla. Unas antes, otras después... ¡dependiendo de los quehaceres de cada una!", nos cuenta su presidenta, María José, que con mucha gracia pide que no salga "ni en pintura" ninguna foto suya. La idea de esta peña, formada únicamente por mujeres, es "comer juntas ya en Barcelona y animar durante todo el día. Y que no falten los cubatillas", dice entre risas su presidenta.

Los 'piques' con el rival no pueden faltar. "El Sevilla ha sido mejor que nosotros estos diez últimos años, pero, si se tiene en cuenta toda la historia, el Atlético es mejor y ha ganado más cosas", creen los colchoneros.

Acordarse del contrario, en el caso de sevillistas y atléticos, no es casualidad. Su mala relación desde hace varios años ha provocado que la Asociación de Peñas de ambos clubes pidan un hermanamiento de cara a la final copera. "Ellos (los atléticos) se llevan muy mal con nosotros. Cada vez que vienen a Sevilla se forma mucho jaleo y hay mucha policía", dice María José. Sin embargo, aclara que "gente mala ha en todos los lados, y debe ser algo aislado". Desde 'Patones' también hay recelo hacía los sevillistas: "Es una de las peores aficiones que conozco", dice su presidente, que recuerda "el vergonzoso partido de Liga del Atleti en Sevilla en 2003". Sin embargo, la final es una fiesta y "por supuesto, cuando los vea por Barcelona me haré fotos con ellos y nos lo pasaremos genial".

Rencillas aparte, ambas hinchadas quieren "traerse la Copa". Las sevillistas son claras: "Quiero que gane mi Sevilla. El árbitro está comprado, la gente va con el Atlético, y, encima, tenemos dos bajas importantes... ¡Que me llamen a mí para jugar!", dice María José. Igual de claro lo tienen los rojiblancos. "El Atleti necesita más este título. Así volverá a ser lo que fue: un grande. Demostraremos que somos el tercer equipo de España tras el Barça y del otro que no quiero ni nombrar (el Real Madrid)".

Mucha superstición

En lo que sí están de acuerdo ambas hinchadas es en la superstición. "¡No quiero hablar de resultado! Con un gol en el último minuto y de penalti nos conformamos", dicen las féminas del Sevilla. "De ganar, tenemos preparada una botella de champán que nos la tomaremos enfrente del Sánchez Pizjuán el día siguiente".

Los atléticos sí dan resultado: "Un 2-1, ahí sufriendo", pronostica entre risas Juan Carlos. "Si ganamos, tengo preparada una sorpresa que no puedo desvelar...". El miércoles saldremos de dudas.