Este sábado era un día marcado en rojo en el calendario de muchos, era día de Clásico. Sin embargo, tras la solicitud de LaLiga para aplazar el partido, este 26 de octubre es un día más de liga, con el permiso del resto de los equipos. 

Una vez aplazado el partido, es el turno del Barcelona de encargarse del reembolso o del cambio de entrada para aquellos que ya la tenían adquirida.

Por eso, el club azulgrana ya ha devuelto más de 3,5 millones de euros en entradas a los aficionados más de 6.000 aficionados que lo solicitaron. Entre estas entradas, había localidades tanto en las gradas como en los palcos VIP. 

El trabajo del club ha sido ejemplar. Desde el primer momento los aficionados y socios sin abono fueron avisados e informados de cómo poder reuperar el dinero lo antes posible, protegiendo su imagen de cara al público. No obstante, el cambio de fecha podría hacer perder al Barcelona hasta 500.000 euros, según ha informado Catalunya Ràdio.