El gran nuevo proyecto de Netflix ha sido El problema de los tres cuerpos. Su aspirante a buque insigniaha zarpado hace unos días y ya está disponible en España con ocho episodios escritos, en su mayoría, por los creadores de Juego de tronos. Estos han advertido que, si todo va bien, la serie tendrá cuatro temporadas, ya que la historia que se desarrolla en la trilogía que adaptan necesita tiempo suficiente para contarse bien.
David Benioff y DB Weiss, los encargados de transformar el best-seller chino de ciencia ficción en una serie, han cuidado al detalle su producción. Para ella, han recurrido a dos viejos habitantes de los Siete Reinos: Liam Cunningham y John Bradley. Su reparto aún podría haber sido más memorable de haber podido convencer a un notorio admirador de la obra original de Liu Cixin, el expresidente Barack Obama.
¿Por qué Obama no quiso aparecer en ‘El problema de los tres cuerpos’?
Cuando a Obama le preguntaron en una entrevista qué leía para distraerse, citó El problema de los tres cuerpos. “Es una trilogía muy imaginativa e interesante. Su impacto es inmenso”. Por esto, y por la estrecha vinculación de Obama con Netflix (incluso ha narrado un documental sobre parques naturales para la plataforma), los creadores de El problema de los tres cuerpos creyeron que tenían una oportunidad.
Obama rechazó aparecer en un cameo de esta serie, pero justificó su decisión con una divertida nota. “Prefiero reservarme para el caso de que se produzca una invasión alienígena real”, contestó. De esta forma, Obama demostró, por una parte, que sabe perfectamente de qué trata la serie y, también, que tiene algo preparado en caso de que los extraterrestres tengan a bien visitarnos. Y, dadas las circunstancias, esta cada vez parece una opción menos descabellada.
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