El increíble cambio de Sandra Bullock: desde 'Speed' hasta sus últimos éxitos en Netflix

Sandra Bullock ha cumplido 59 años siendo una de las actrices más reconocidas tanto en España como mundo, gracias a sus casi cuatro décadas de trayectoria en las que ha participado en las mismas películas que años tiene (aunque ahora se haya tomado un descanso). Su carrera, aunque comenzó en los años 80, realmente se forjó en la última década del siglo pasado gracias a títulos como Demolition Man o Speed.

El verdadero estatus de estrella llegó a principios de los años 2000 gracias a las comedias románticas que protagonizó y que convirtieron a la actriz de Arlington en una de las estrellas del género. Eso sí, con 40 años de carrera, la filmografía de Sandra Bullock ha cambiado notablemente, al igual que ella.

Sandra Bullock en los 80: primeros papeles

La actriz no aparecería en su primera película hasta 1987, con 23 años, cuando tuvo un papel casi minúsculo en la cinta En la soga floja. Durante el resto de la década solo participó en otras dos producciones, ambas de 1989: Mi novio quiere ser millonario y ¿Quién disparó a Patakango?, aunque ninguna tuvo ningún tipo de éxito, al igual que las tres TV movies en las que se involucró ese año.

Sandra Bullock en los 90: popularidad

Llegaron los 90 y con ellos la fama para la actriz. Aunque la década comenzó de manera tibia, con Poción de amor nº9 (1992), una comedia romántica que casi ni se estrenó en cines, en 1993 surgieron las primeras grandes oportunidades para la actriz: se unió a Sylverster Stallone (que no ha perdido un ápice de fuerza) en Demolition Man, que recaudó casi 160 millones en la taquilla internacional. 

Ese año no paró de trabajar, ya que participó en otros cinco proyectos (incluyendo un musical con el fallecido River Phoenix). Pero fue pocos meses después, en 1994, cuando le llegó el reconocimiento total de todo el mundo con 30 años gracias a la película Speed, en la que Bullock interpreta a una novel conductora de un autobús escolar que porta una bomba. Tres años después retomaría el papel en la secuela.

La cinta, que protagonizó junto a Keanu Reeves, que está pensando en volver para una hipotética tercera parte, aupó a la fama a Bullock, que comenzó a ser el principal rostro de numerosas películas en la segunda parte de la década, especialmente de comedias románticas, como Mientras dormías (1995), Corazones robados (1996) o Las fuerzas de la naturaleza (1999), que estelarizó con Ben Affleck.

Pero la actriz no solo participó en películas del mismo género, ya que también fue uno de los principales rostros en otro tipo de largometrajes, como drama (En el amor o en la guerra, 1996), thriller (Tiempo para matar, 1996) o fantasía (Prácticamente magia, 1998). Además, también se introdujo en el mundo del doblaje, poniendo voz al personaje de Miriam en El príncipe de Egipto (1998).

Sandra Bullock en los 2000: estrellato

El nuevo milenio trajo a Sandra Bullock su estatus de estrella mundial. Arrancó la década con un gran taquillazo como Miss Agente Especial (2000), en la que se infiltró en el concurso de belleza siendo policía (la secuela llegaría cinco años después). Al año siguiente se tomó un descanso, pero en 2002 protagonizó tres películas de tres géneros completamente distintos.

Estrenó Asesinato...1-2-3, un thriller de suspense junto a Ryan Gosling (que deja atrás a Ken en su nuevo proyecto); participó en una película de su género por excelencia, la comedia romántica, con Amor a segunda vista, y también apareció en el drama Clan Ya-Ya. Bullock, con 38 años por aquel entonces, ya era toda una superestrella.

Ese estatus lo confirmó (con 40 años) en 2004 con Crash, cinta ganadora del Oscar a mejor película y que consiguió el consenso de crítica y público. A pesar de que tenía un papel muy secundario en una película muy coral, es uno de los proyectos más recordados de una actriz que dos años más tarde, en 2006, participaría en dos dramas: La casa del lago e Historia de un crimen.

Mientras que al año siguiente solo apareció en una cinta (Premonition, 2007), la década no pudo terminar de mejor manera para Sandra Bullock. Protagonizó la comedia Todo sobre Steve (2009), aunque las otras dos películas que realizó ese año fueron clave en la carrera de la actriz, una por motivos de popularidad y otra por la crítica. 

La proposición, la comedia romántica en la que compartió papel principal con Ryan Reynolds, consiguió recaudar más de 317 millones de dólares en todo el planeta, mientras que su interpretación de Leigh Ann en Un sueño posible hizo que Bullock ganase su primer (y hasta ahora, único) premio Oscar a los 46 años.

Sandra Bullock en los 2010: menos proyectos, más éxito

La primera mitad de los 2010 fue menos productiva para Bullock, ya que solo interpretó papeles en tres películas en cinco años, aunque todas fueron un absoluto éxito. En 2011 participó en el drama Tan fuerte, tan cerca, en el que daba vida a la madre del pequeño Oskar. En 2013 más tarde protagonizó la comedia de acción Cuerpos especiales, aunque el mayor éxito de ese año (y de su carrera) llegaría con otra cinta.

Por primera vez en su carrera, Sandra Bullock voló hacia el espacio exterior en Gravity (2013), la cinta de Alfonso Cuarón que arrasó en las categorías técnicas de los Premios Oscar y en la que la actriz, protagonista absoluta de la cinta, lucha entre las estrellas y cuerpos estelares para poder regresar a La Tierra. Además, fue el rol por el que la actriz más dinero ha recibido.

Bullock se tomó un lustro de descanso antes de regresar a la gran pantalla en 2018 con dos de las grandes películas de ese año. Si en Gravity acompañó a George Clooney a la estratosfera, cinco años después interpretó a su hermana en Ocean's 8, el remake femenino de la famosa cinta de Steven Sorderbergh. La cinta recaudó casi 300 millones.

A pesar del gran número de beneficios, su cinta más exitosa de 2018 la realizó con Netflix: protagonizó Bird Box (en España se llamó A ciegas), que se convirtió por aquel entonces en la cinta más vista de la historia de la plataforma y que fue un auténtico fenómeno viral a comienzos del año siguiente. Con 54 años, Bullock demostró que también podía hacer de aventurera.

Sandra Bullock en los 2020: Netflix y grandes taquillas

En estos tres años y medio de década, Bullock ha protagonizado tres películas: el drama Imperdonable (también para la plataforma), en el que encarna a una mujer que sale de la cárcel en la que ha estado tras cometer un crimen violento; la comedia La ciudad perdida junto a Channing Tatum y la cinta de acción Bullet Train junto a Brad Pitt.

Hace escasas semanas se estrenó en Netflix Bird Box Barcelona, protagonizada por Mario Casas y ambientada en el mismo universo apocalíptico que la cinta de 2018, pero que no actúa a modo de secuela. Sandra Bullock no aparece en la película, ni hay referencias siquiera a su personaje.

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