Una jornada electoral de sol y playa

Cuando la jornada electoral se celebra en pleno verano, normal que en las colas uno se encuentre con muchas chanclas, muchas bolsas de playa y muchos bañadores. Ana, acompañada de su hijo, se pasa antes por el colegio electoral y después planta su sombrilla en la playa. "A nosotros nos ha tocado votar por correo", asegura un hombre junto a su familia tomando el sol. También los hay que apuran las horas ante el mar y que ejercerán su derecho a voto después. Porque disfrutar del sol y del día de playa es compatible si se quiere con ir a votar en unas elecciones.