Según ha explicado la vicepresidenta, Mónica Oltra, no se rebaja la seguridad, ya que se estudiará "caso por caso" cada solicitud y solo se aplica a festejos con "profunda traición" en el territorio. Se ha buscado, ha dicho, una solución "conciliadora" que compatibilice una prevención eficaz de los incendios forestales con el desarrollo de actividades de honda tradición cultural en la Comunitat.

El anterior decreto no regulaba ni recogía ninguna actividad relacionada con el uso del fuego en manifestaciones festivas en las que se suelen utilizar artificios de pirotecnia, realización de hogueras o cualquier otro dispositivo generador de fuego, pero un conjunto importante de manifestaciones festivas que se celebran a lo largo del territorio valenciano utilizan el fuego o la pólvora como elementos centrales de sus fiestas.

El Consell consideraba, por tanto, necesaria una revisión de la regulación teniendo en cuenta los niveles de riesgo realmente existentes en función de su localización. Además, si el nivel de riesgo declarado es máximo (preemergencia 3) no se podrá celebrar ninguna actividad de estas características.

Cada ayuntamiento deberá delimitar y proponer a las direcciones territoriales de la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural, para ser autorizado de forma excepcional. Se elegirá el emplazamiento más adecuado para el montaje del evento, siempre desde el punto de vista de la minimización del potencial riesgo de inicio y propagación de fuego a las masas forestales colindantes.

Cada emplazamiento autorizado será inscrito en un registro de carácter público y una vez autorizado el ayuntamiento promotor deberá realizar una declaración responsable donde manifieste que cumple con los requisitos establecidos. A partir de ese momento el ayuntamiento dispondrá de un seguro de responsabilidad civil específico que otorgará cobertura al riesgo generado por el evento en concreto.