Decenas de aficionados del West Ham atacaron este martes el autobús que trasladaba al Manchester United al estadio de Boleyn Ground, donde ambos equipos disputaron un partido aplazado de la Premier que comenzó con 45 minutos de retraso, por estos incidentes, y que acabó con la victoria de la escuadra londinense por 3-2.La imágenes que circulan por la redes sociales muestran el autobús que trasladaba a los jugadores del United al estadio, al este de Londres, atacado por una multitud de hinchas del West Ham, incluso con piedras. En un momento del vídeo se puede ver un agujero en uno de los cristales del vehículo.