Según ha informado la Conselleria en un comunicado, el objetivo es "proteger esta especie" y "asegurar una pesca sostenible" y, por ello, la cantidad de pesca permitida por licencia y día es de unas cincuenta unidades, con un máximo de trescientas unidades por embarcación.

La pesca del raor es principalmente de carácter recreativo, ya que de manera profesional solo se dedican dos o tres embarcaciones por isla, unos diez o doce profesionales de un total de trescientos sesenta, y no con mucha regularidad.

Por ello, la cantidad de pescado que se comercializa es muy poco representativa respecto a la cantidad total pescada. En cambio, una buena parte de las más de 30.000 licencias individuales y más de 10.100 embarcaciones recreativas sí lo hacen.

La veda del raor se estableció por primera vez en el año 2000 hasta el 31 de julio y, posteriormente, y a la vista de los buenos resultados, con el paso de los años se ha ampliado y complementado con otras medidas.

Como resultado de todas estas medidas y del elevado grado de cumplimiento de la veda, la presencia de la especie y las capturas se han mantenido en todas las zonas de pesca, con un incremento medio del 20 por ciento en el tamaño de los peces.

La campaña del raor se suma a la de la lampuga, que comenzó el 25 de agosto y terminará el 31 de diciembre. Se trata de una de las más esperadas por los pescadores profesionales debido a los buenos resultados comerciales que históricamente da al sector.