La Fiscalía de Cantabria ha solicitado una pena de siete de años de cárcel para un hombre por un presunto delito de lesiones, ya que está acusado de golpear con un vaso de sidra y dar dos patadas en al cara a un joven, que perdió la visión en el ojo derecho.

El juicio contra J.H.R. se celebrará el próximo 14 de enero en la Sección Tercera de la Audiencia de Cantabria, a partir de las 10 horas, y el fiscal también ha solicitado que indemnice a la víctima con más de 51.300 euros por las lesiones y secuelas y 600 por gastos farmacéuticos. Asimismo, pide que abone más de 6.300 euros al Servicio Cántabro de Salud (SCS) por la atención prestada.

Según el escrito del Ministerio Público, recogido por Europa Press, los hechos ocurrieron en la madrugada del 31 de enero de 2014. Sobre las 3.30 horas, el acusado, después de discutir con la víctima al creer que momentos antes le había quitado la cazadora, le golpeó con un vaso de sidra en el ojo, y poco después le dio dos patadas en la cara.

A consecuencia de la agresión, el joven -que en aquel momento tenía 28 años- sufrió una herida de 2 centímetros que le afectó al ojo derecho, además de heridas incisas en la zona frontal y malar derecho.

Precisó para curar tratamiento quirúrgico y facultativo, y 151 días más, de los que 9 estuvo hospitalizado y los 142 restantes, de baja. Como secuelas, y entre otras, destacan la pérdida de visión del ojo derecho y un perjuicio estético "moderado", según la forense.

La asistencia en el Hospital Valdecilla -atención en urgencias, operación y consultas- generó unos gastos de 6.341 euros, que J.H.R. deberá abonar al SCS, así como afrontar el pago de 603 euros de fármacos no incluidos en las facturas del sistema sanitario público. También tendrá que indemnizar a la víctima con 51.349 euros, según ha solicitado la Fiscalía, que interesa siete años de cárcel.

Mientras, la Acusación Particular eleva de prisión a ocho años, y la indemnización a 103.370 euros, a sumar a los gastos del SCS y de los medicamentos no costeados por la Seguridad Social.

Finalmente, la Defensa se muestra disconforme con el relato de los hechos del Ministerio Público y la Acusación Particular, ya que si bien su patrocinado lanzó, "por imprudencia grave", el vaso a la cara del lesionado, ha "ayudado en todo momento en todo momento y desde el principio" al esclarecimiento de los hechos.

Así, esta parte considera que los hechos no son constitutivos de un delito de lesiones, al tiempo que concurren las atenuantes de reparación del daño, de arrepentimiento y de embriaguez no habitual, por lo que pide que se le condene a dos años de cárcel.