Miguel Chavez es un chico de 17 años de Houston, Texas (EE UU), que perdió una apuesta. El creía que su equipo, los Houston Rockets de la NBA, iban a ganar a los Golden State Warriors. No fue así y sus amigos se cobraron la apuesta.

La idea era atarlo con cinta americana. Tenían la duda de hacerlo a un coche a una señal de tráfico. Tras un lanzamiento de moneda al aire, salió ganadora la opción de la señal de tráfico. Con cuatro rollos de cinta dejaron a Miguel suspendido en el aire.

La Policía fue avisada por algunos conductores y acudieron a ver qué estaba pasando. Dio la casualidad que cuando llegaron, encontraron a uno de los amigos de Miguel con un cuchillo. Pese a las dudas iniciales, tanto Miguel como el amigo explicaron que iban a cortar la cinta para bajarlo. Según el relato de Miguel a Inside, los agentes acabaron riéndose.