Una mujer de 25 años estaba dirigiéndose a su casa en Alabama (EE UU) cuando un hombre armado le atracó, al ver que no tenía dinero, le obligó a entrar al maletero del coche. Se dirigieron hacia una gasolinera, donde el secuestrador paró a repostar. Cuando tomaban de nuevo la marcha, la mujer logró escapar del maletero y marchó corriendo hacia la tienda en busca de ayuda. El sospechoso logró escapar, pero su rostro fue grabado cuando entró al establecimiento y la policía conoce su identidad, pero aún no ha sido detenido.