Mohamed Lahouaiej lo tenía todo planeado

Mohamed Lahouaiej Bouhlel, 31 años, tunecino, vivía en Niza y era repartidor de profesión. Tenía todo perfectamente planeado. El camión lo alquiló el lunes y debía devolver el miércoles. Pero ese día lo dejó aparcado en el barrio Oriol en el este de la ciudad, hasta el día del atentado. A las diez y media una cámara le sitúa circulando por el Barrio Magnan, en el oeste, antes de perpetrar el ataque. Había sido detenido varias veces por robo, amenazas y maltrato. Incluso fue condenado en marzo a seis meses de cárcel por violencia con armas, pero no ingresó en prisión. En el interior del camión la policía encontró su carné de conducir, un móvil, una tarjeta de crédito y el arma con la que disparó