Creador multiusos

El compositor Patrick Wolf llega al Monasterio de la Cartuja. Canta, toca el violín, el ukelele, la guitarra, el piano y manipula sus sonidos con su Mac
Una imagen cuidada en todo momento, que hace que sus fotos sean toda una obra de arte.
Una imagen cuidada en todo momento, que hace que sus fotos sean toda una obra de arte.
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Una imagen cuidada en todo momento, que hace que sus fotos sean toda una obra de arte.
Es un concepto de música distinto del que actualmente predomina, y es que más que música en su concepto más común, Patrick Wolf consigue una buena sonoridad, un equilibrio acústico entre sonidos tan dispares como una batería y un violín.
 
Hay muchos que dicen de él que es como una Björk, pero en masculino. Mejor dicho: en jovencito, ya que Wolf acaba de cumplir 21 añitos. Ya, y pese a su filosofía musical poco comercial, se ha convertido en un ídolo de masas.
 
Colaboran a este éxito sus indescriptibles modelitos. En el último concierto que dio en Barcelona apareció con unos pantalones piratas cortados desigualmente y unas grandes botas con las puntas levantadas, al estilo de Pipi Calzaslargas.
 
Lo que está más que claro es que el oído de este chico es prodigioso, ya que sabe lo que es la mezcla, algo muy habitual en la música de hoy en día. En el escenario, además de cantar, toca el violín, manipula los sonidos a través de su Mac, toca el ukelele, la guitarra y el piano. Parece increíble pero es cierto, como también lo es que es capaz de entregarse al público de una manera plena. De ahí que lo llamen el encantador de serpientes. Si quiere descubrir su singularidad, sepa que ésta es su única oportunidad, ya que tras el concierto en el Monasterio de La Cartuja, el joven emprenderá una larga gira por toda Inglaterra.
 
* Centro Andaluz de Arte Contemporáneo. Américo Vespucio, 2. Mañana, a las 21 h. Entrada 5 euros. Inf.: 010.
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