La consellera de Acción Social y Ciudadanía, Carme Capdevila, explicó ayer que el objetivo del complemento que otorga la Generalitat es facilitar el acceso a las residencias a aquellos que «no pueden ir porque no puede pagar» la plaza.
Se trata especialmente de mujeres de más de 50 años, amas de casa, que viven solas, con pensiones bajas (entre 600 y 900 euros) y no pueden costear una plaza de precio medio de 1.200 a 2.000 euros mensuales. Hay 10.000 catalanes con alta dependencia que ahora se lo pagan de su propio bolsillo.
Beneficia al 80% de solicitantes
La ayuda extra aprobada por la Generalitat beneficiará a los que tengan una pensión mensual que no sobrepase los 1.264 euros al mes, que son el 80% de los evaluados hasta ahora. Para los que tengan una pensión superior a 2.785 euros, la prestación total será de 624 euros. Hasta el 15 de noviembre se presentaron 52.068 solicitudes de valoración (32.000 están hechas).
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