El ya ex jugador del Real Madrid Míchel Salgado, con una mezcla de tristeza y satisfacción, ha hablado tras conocerse que la próxima temporada no jugará en el equipo blanco.  En rueda de prensa, el gallego aseguró que "mis sentimientos son cruzados, tristeza por un lado, ya que he aprendido a querer al Real Madrid, y alegría por otro, porque cuando miro hacia atrás siento orgullo de lo que he logrado aquí, en el mejor club del mundo. Me siento muy orgulloso de haber podido vestir diez años esta camiseta".

Tras un vídeo en el que se recogieron los mejores momentos de su paso por el Madrid, con el que ha conseguido 4 Ligas, 2 Copas de Europa, 1 Intercontinental, 1 Supercopa de Europa y 3 Supercopas de España, el defensa pontevedrés explicó "lo duro" que le ha sido aceptar que su larga etapa en el equipo ha llegado a su fin: "El momento era esperado, pero te niegas a que llegue. Una vez que entrenas con el equipo en pretemporada te haces ilusiones, pero es muy duro perder importancia y poder llegar a una final de la Liga de Campeones en el Bernabéu y no estar en el campo, ni convocado".

Sin embargo, Salgado afirmó que todavía puede "alargar" su vida como futbolista y que "en frío, tienes que ver las cosas de otra manera, ver que los ciclos se acaban". Porque él se encuentra "con fuerzas para competir al más alto nivel", aunque entiende que "la exigencia del Real Madrid es otra" y que "viene gente con mucha fuerza".

"No tiene que ver con Pellegrini, me ha tratado fenomenal, como uno más, pero la llegada de un nuevo lateral ha obligado a tomar una decisión", añadió.

Vicente del Bosque, su mejor entrenador

Salgado, de 33 años, realizó un repaso sobre sus diez años como jugador blanco y destacó la octava Copa de Europa del Real Madrid, en París frente al Valencia, como su mejor momento, y, sin olvidarse de ninguno, a Vicente Del Bosque, como su mejor entrenador, ya que el salmantino es el técnico con el que más tiempo ha coincidido el gallego.

"El Real Madrid va a ser especial para mí toda la vida. He podido hacer muchas más cosas de las que hubiese soñado, por eso me siento orgulloso", añadió el lateral, que tuvo palabras de agradecimiento para todos los empleados del club, presidentes, entrenadores, jugadores (dónde destacó a Raúl, Guti, Casillas y Roberto Carlos), a su agente (Ginés Carvajal), a su familia y amigos y, por último, a los medios de comunicación.

Ahora, y después de despedirse esta tarde de forma privada de toda la plantilla y empleados del club, y en el trofeo Santiago Bernabéu de toda la afición, Míchel Salgado estudiará "con libertad" las ofertas que le lleguen para seguir jugando "dos o tres años más".

"Tendré la libertad para ver las ofertas que tenga. Por ahora no voy a decir nada, porque lo primero que tengo que hacer es respetar todas las ofertas. Voy a madurar la decisión, pero va a primar el hecho de que me ilusione y que me motive", manifestó el ya ex madridista, que añadió que será "muy duro" jugar en el Bernabéu "con otra camiseta".

Por su parte, Jorge Valdano, que ejerció de anfitrión en la despedida del gallego, destacó que "se va una gran persona, un gran profesional y uno de esos jugadores que dejará huella en el club", al tiempo que significó su "comportamiento impecable". "Despedimos a un grande", dijo.