Liz Hurley engordó sus labios; Demi Moore aumentó su pecho y se arregló la nariz; Rachel Welch sumó tallas a su sujetador –menos que Pamela Anderson–, se estiró la piel de la cara –como Catherine Deneuve– y se quitó una costilla.

 

Las reinas de la estética

 

Nada comparado con Cher, Priscilla Presley o Elisabeth Taylor, que cuentan con más de una veintena de operaciones cada una. Melanie Griffith lleva otras tantas, pero Antonio Banderas le pidió que frenara «por el bien del matrimonio». Ni las divas clásicas se resistieron. Greta Garbo se arregló los dientes; Rita Hayworth, el nacimiento del pelo; Marlene Dietrich, la nariz; y Marilyn Monroe corrigió su mentón y unos bultos nasales. Michael Jackson lo dijo: ¡Todo Hollywood se opera!