Se trata de un hombre de 73 años, Juan A.T, alias 'El cojo', de quien los vecinos no sabían nada desde el mes de agosto.

Juan A.T, viudo, convivía con su compañera sentimental, una mujer de unos 30 años de origen sudamericano con quien mantenía frecuentes discusiones, según los vecinos, que pensaban que podía estar pasando una temporada en su pueblo natal, Frías, donde tenía un piso.

La Ertzaintza investiga el caso como un posible homicidio, según confirmó al Correo Digital el Departamento de Interior. Además, según la misma información, ni la mujer ni el coche -un Peugeot 206 rojo que él conducía pese a su minusvalía-, se han encontrado.

El hallazgo se produjo después del fuerte olor que salía del piso donde vivía el individuo, en la calle Irala de Bilbao, a la que accedió un cuñado de Juan A.T. tras pedir las llaves a una inmobiliaria.

El cuerpo sin vida fue encontrado en la cama de su habitación, amordazado, tapado y en avanzado estado de descomposición, según indicaron fuentes de la investigación. Además, presentaba algunos golpes en la cara, concretamente en la mandíbula, por lo que la Ertzaintza cree que fue víctima de una muerte violenta.

Los primeros indicios apuntan a que el hombre podía llevar cerca de dos meses fallecido, a falta de conocer el resultado de la autopsia.

Especialistas de la sección de Policía Científica de la Ertzaintza (AFIS) e investigadores de homicidios buscan pruebas que permitan esclarecer el caso y dar con posibles homicidas.

La Ertzaintza ha llamado a declarar uno por uno a todos los residentes en el inmueble, de cinco plantas, en busca de pistas. En las entrevistas, los ertzainas les han mostrado la fotografía de una mujer, fichada por la Policía, que podría ser la última compañera del hombre y de la que se desconoce su paradero.

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