Los trabajadores de la sede se han encontrado esta mañana con los restos del ataque: cristales rotos en el suelo y el trapo con el que prendieron fuego al combustible -gasolina- utilizado para atacar la sede del Partido Socialista de Madrid (PSM).

Acto seguido, han dado parte a la Policía Nacional, que ya analiza las cintas de vídeo grabadas por las cámaras de seguridad del local, y que todavía no quiere avanzar la autoría de los hechos, aunque miembros de la ultraderecha podrían haber protagonizado el suceso.

El ataque, no obstante, no ha causado daños en la fachada de granito, ni apenas en la sólida puerta metálica del lugar.

El secretario de organización del PSM, Andrés Rojo, ha denunciado este ataque y expresado su confianza en que la labor policial y las grabaciones efectuadas permitan identificar en breve a "los energúmenos autores de este ataque".