El gato de Schrödinger, muerto y vivo a la vez, ilustra un famoso experimento de física cuántica que el escritor Carlos Zanón evoca justo cuando Cataluña puede ser, a un tiempo, una comunidad autónoma a punto de ser intervenida y una virtual república independiente declarada unilateralmente. Las prórrogas del Gobierno Rajoy no han surtido efecto. El marcador no se ha movido. El gato no puede estar vivo y muerto. Hacienda ya echó mano de la Ley de Estabilidad Presupuestaria para intervenir las cuentas de las comunidades cuando Bruselas exigió cuadrarlas. Montoro va a pagar las próximas nóminas sin que se oiga ruido de cacerolas. El 155, que significa que el Estado toma el control de la autonomía en áreas concretas, es inevitable si Puigdemont se niega a coger el salvavidas de las elecciones. La ley da plazos y tiempo, pero no hasta el punto de generar fenómenos cuánticos.
OPINIÓN19.10.2017 - 19:46h
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios