El Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino pretende impulsar la creación de una 'marca-país' con el objetivo de favorecer la internacionalización de los alimentos españoles en mercados como Estados Unidos, Rusia o Brasil, según anunció la titular de este departamento, Rosa Aguilar.

Durante su intervención en el Foro Nueva Economía, la ministra destacó la internacionalización como uno de los objetivos prioritarios para la industria alimentaria, "con una política de calidad de productos y servicios a precios competitivos".

Aguilar se comprometió a apoyar las reivindicaciones del sector en la revisión de los reglamentos de promoción comunitarios para lograr un equilibrio entre la promoción marquista y la genérica y para abrir las medidas a otros productos, como los cárnicos o los huevos.

Entre los retos de la industria alimentaria, también apostó por mejorar el funcionamiento de la cadena, lo que en su opinión se logrará con un reparto "equitativo del valor añadido" y con precios "más justos", especialmente para los eslabones más débiles.

En este sentido, afirmó que el Ministerio impulsará un grupo de trabajo con el sector, la Comisión Nacional de la Competencia (CNC) y los ministerios de Economía y Hacienda e Industria, Turismo y Comercio para mejorar el funcionamiento de la cadena.

Norma sobre calidad diferenciada.

Asimismo, señaló que en breve comenzará la tramitación parlamentaria de la Ley de Calidad Alimentaria, que incluirá toda la parte referida al funcionamiento de la cadena alimentaria, mientras "se profundiza en el debate sobre la calidad diferenciada, que podría incluirse en una norma posterior, dando con ello respuesta a las peticiones del sector".

Aguilar pretende impulsar un "gran acuerdo" con la industria agroalimentaria y los sectores de la gastronomía, el turismo y la cultura para establecer un programa de valorización y conocimiento de los alimentos. También anunció la elaboración de un plan de acción para la puesta en valor de los componentes de la dieta mediterránea.

La pac:

Una política de estado.

Preguntada acerca de la oposición de alguna comunidad autónoma, como Castilla y León, al documento sobre la Política Agraria Común (PAC), la ministra recalcó la necesidad de "sumar fuerza y esfuerzos", ya que la PAC es una "política de Estado" que requiere "abordarla con fortaleza para no dar un paso atrás". "Nos jugamos mucho, más de 7.000 millones de euros", subrayó.

En relación con los reparos manifestados por la CNC sobre el decreto del sector lácteo, recalcó que el Gobierno pretende "cumplir con el sector y publicarlo, a sabiendas de que hay algunas cuestiones que se resolverán antes de verano a través del ordenamiento europeo".